Y,aunque se me vaya la cabeza,digo verdades que,por el hecho de ser verdades,a nadie le gusta oír.

A veces me miro al espejo y no me odio,trato de ignorar mis defectos.Pero la cosa cambia cuando salgo a la calle y ya no me veo reflejada en mis propios ojos,sino en los de los demás.Entonces,bajo la mirada,no quiero que me miren ni quiero verlos.Qué situación tan humillante,debería darme vergüenza reconocerlo.Puede que no sea un engendro,no tengo la cara deformada ni nada de eso.Soy perfectamente consciente de que los demás no pueden aceptarme si no soy capaz de aceptarme primero yo misma.Pero no puedo hacerlo,no puedo.Llegado a este punto,pienso que la opinión que yo tenga sobre mí misma es mía y de nadie más.El hecho de que no me acepte no quiere decir que todos me tengan que odiar o,visto de otro modo,que no me puedan querer.Tengo mis defectos y supongo que mis virtudes.Por eso no se puede hacer una visión selectiva,hasta el ser más "perfecto" tiene defectos.Hay que aceptar a las personas tal y como son,porque así son perfectas y no necesitan cambiar.Qué aburrido sería si todos fuéramos perfectamente iguales.Maldita sociedad capitalista,materialsta y consumista que,en vez de promover los valores humanos,promueve sacar el máximo beneficio de todo sin preocuparse por los demás.Una sociedad en la que,si no eres perfectamente estética y egoísta,no existes o eres una amenaza.Bueno,pues a mí no me va ese juego y por eso te digo que no me mires si no sabes verme.Soy el ser más imperfecto que existe,pero yo valgo más que eso.No voy a desperdiciar mi vida,la dedicaré a ayudar a los demás,ya que alguien tiene que hacerlo y dudo mucho que sean esas personas "perfectas" quien lo hagan.